Las oficinas virtuales son uno de esos cambios necesarios para todo emprendedor que desee optimizar y capitalizar sus recursos. A primera vista, tal vez lo que podría parecer más extraño de este concepto es el hecho de que el área para laborar no cuenta con un espacio definido, un área física como tal. Si pensamos en las ideas de negocios que han imperado durante décadas y en los planteamientos tradicionales sobre qué es iniciar una empresa, estamos ante un campo, si bien ya implementado, completamente nuevo, que tiene como ventaja proteger el dinero de aquel emprendedor incipiente o que por sus circunstancias necesita de un modelo virtual.
Dos de los ramos que más se han inclinado a aprovechar las ventajas del modelo virtual son las casas productoras de cine y los publicistas o aquellos que se desenvuelven en la publicidad o relaciones públicas.
Otra de las ventajas que se ofrece es la posibilidad de facilitar la expansión comercial de una persona que, por ejemplo, empezó su empresa en Guadalajara y quiere alcanzar el mercado del Distrito Federal o de Monterrey. Con las oficinas virtuales esto es posible y sencillo con un capital mucho menos considerable que el que implicaría realizar la instalación de una oficina física, además de reducir por mucho el riesgo de perder los recursos invertidos en caso de que el negocio no dé los resultados esperados.
Además de salvaguardar lo invertido, la modalidad virtual permite otra forma de cuidar el dinero: además de no gastar en el equipamiento de una oficina (desde conseguir el local, pagar una renta mensual con sus servicios, elegir y poner mobiliario, así como el equipo de computo adecuado) el proyecto en cuestión se vuelve más remunerable que otros en el mismo ramo.
Lo que mencionábamos sobre la tecnología al principio de este artículo es en verdad la puerta para la comodidad y practicidad del empresario. Supongamos que se dispone a hacer un viaje de negocios a Estados Unidos o algún punto de Latinoamérica y que en su jornada del día regresa cansado y sólo puede revisar su proyecto durante la madrugada o bien entrada la noche, en este caso el modulo virutal caso el mficina puede s Unidos o algacticidad del empresario. Supongamos que se dispone a hacer un viaje de negiosódulo virtual seguirá funcionando (una gran ventaja frente al espacio físico). Un lugar con internet, un buen dispositivo móvil y una computadora portátil le ayudarán a mantener su oficina en funcionamiento.
Si por el contrario no tenemos la necesidad de ir tan lejos, el trabajo desde el hogar ofrece ajustar el horario conforme a nuestras actividades del día y la posibilidad de poder contratar y tener comunicación constante con un empleado cuyo perfil es el que tu empresa requiere y que tal vez vive en el otro extremo del país.
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