En ciudades como el Distrito Federal cuyo tipo de vida es elevado en comparación con ciertos estados de provincia, la idea de instalar tu propia oficina puede llevarte a las mismas conclusiones que muchos emprendedores han llegado: intentarlo se vuelve una oportunidad sólo para empresarios que llevan ya un buen tramo del camino recorrido, con inversiones seguras y un mercado muy vasto; para los demás puede ser una idea ostentosa, por decirlo de alguna forma.
Considerar la idea de conseguir un espacio barato también implica sus complicaciones, ya que muchas veces estos lugares se encuentran en puntos lejanos a las zonas urbanas, cuyo mercado ya por sentado no será un fuerte para el desarrollo de la empresa. En otras palabras aunque la renta que se pague sea relativamente barata la imagen y el impacto en el cliente no serán positivos, y el mercado en lugar de llegar directamente a tus instalaciones tendrá que ser cazado con un esfuerzo extra al que habitualmente se haría.
Otra alternativa que han aplicado los emprendedores es repartir los costos y el espacio con otro emprendedor, lo cual implica otras complicaciones como tener el mismo personal en común y estar expuesto al tipo de rencillas que suceden entre socios.
Si la situación que atraviesas es similar a lo que describimos, o tu ambición es expandirte pero te frenan los temores que conlleva la inversión, una solución segura es buscar la renta de oficinas. Al tomar esta decisión todos los problemas enumerados antes no existen, y la labor para localizar una zona conveniente a tu mercado, amueblar e invertir se resume en una sola: el pago de una renta mensual que incluye prácticamente todo.
En Oficinas IBS tendrás la posibilidad de recibir a tus clientes en un espacio acondicionado adecuadamente, el cual proyectará confianza y formalidad en la impresión que se lleven de ti, un espacio con el equipo y todo lo requerido para concentrarte en las labores que toda empresa incipiente o toda expansión necesita.
Esta opción también puede ser excelente para aquel freelancer con ambición que sólo requiere de un pequeño impulso durante un lapso de tiempo para arrancar por su propio cuenta y crecer. El hecho de contar con tu propia oficina es el sinónimo de una buena carta de presentación, algo así como el suelo para tu propia campaña publicitaria. Además de que tu propia oficina cuenta con el espacio suficiente para que pueda laborar con el equipo de trabajo que elijas, otros profesionistas que (con todas estas certezas) te ayudarán a materializar y capitalizar tu proyecto en un tiempo considerablemente breve si es comparado con todo el proceso de instalación e inversión que requiere poner tu negocio, esto sin contar que la pérdida de capital en el caso de que tu proyecto no dé el resultado deseado será, por mucho, menor.
El tiempo en el que contrates un servicio de renta de oficinas, ya sea y dependiendo de tus necesidades, un espacio físico o virtual, significa que en realidad tienes tu propio lugar, donde tu trabajo será respetado. Por mucho, resulta la mejor opción para tener una plataforma de crecimiento.
